“Los clásicos se ganan. Dirigentes cagones”. Así decían los panfletos intimidatorios arrojados en las inmediaciones de la propiedad del presidente de Newell’s, Guillermo Lorente, al que también le quemaron el frente de la casa. También sufrió un hecho similar el vice, Jorge Ricobelli.
Al parecer, un grupo de desconocidos quemó gomas a metros de la puerta de la vivienda de Lorente. Y de no ser por la veloz respuesta de unos vecinos, todo pudo terminar peor, ya que el fuego se acercó a la cámara de gas.
En tanto, el vicepresidente del club leproso también recibió escritos relacionados con la derrota en el último clásico rosarino del pasado domingo. En la puerta de su casa sufrió pintadas alusivas al partido con Central.