La Justicia santafesina investiga un caso de abuso sexual a un nene de 6 años, ocurrido en un colegio privado del centro de Rosario. Las distintas fuentes y documentación consultadas por el diario La Capital coinciden en que «hay indicadores de abuso sexual» y que «algo pasó en la escuela». Ahora se espera la conclusión de la feria de invierno para saber qué rumbo seguirá esta pesquisa, teñida de muchas dudas.
Por tratarse de un tema en proceso de investigación, y sobre todo porque hay un niño de por medio, se reservan los datos que puedan vincularlo con su identidad. Por la misma razón, tampoco se dan detalles relatados en la documentación ofrecida por la madre.
El hecho se hizo visible para la familia el 8 de mayo pasado, fecha en que por última vez esta criatura pisó un salón de clases (ahora es asistido en su casa por una maestra domiciliaria).
Sin embargo, la mamá asegura que su hijo fue sometido a diferentes atropellos desde marzo. Y que «hay adultos involucrados». Fue en mayo también cuando arrancó un periplo por distintas oficinas públicas tratando de dar curso a la denuncia. Despachos que incluyen a la propia escuela, Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes de la provincia, Oficina de Derechos Humanos santafesina, Ministerio de Educación provincial, Centro de Asistencia Judicial, Centro de Asistencia a la Víctima de Delitos Sexuales (CAVDS) y la Justicia de Santa Fe.
El CAVDS citó a la mamá con el nene para una pericia psicológica y física para el 20 de mayo. Hay que saber que, una semana antes, la madre había hecho revisar a su hijo por profesionales particulares, que en sus informes coinciden (no lo confirman y en uno de ellos hasta es confusa la explicación técnica) en que hay «indicadores de abuso sexual».
En ese centro, que depende de la Comisaría de la Mujer, se le toma sólo la pericia psicológica ya que el relato del niño —descripto como «coherente y sin contradicciones» por los profesionales que la dirigieron— se acerca más a un caso grave y extremo de bullying, donde intervienen chicos más grandes. De ahí se lo deriva a los Tribunales.
La investigación está en manos de la jueza María del Carmen Musa (Juzgado de Menores Nº 1), que en diálogo con este diario señaló que todas las actuaciones que se realizaron desde su despacho, desde fines de mayo (cuando toma la causa) hasta ahora, se hicieron «siempre privilegiando el interés superior del niño» y en función de «no seguir victimizándolo».
A pedido de la madre, se realiza una pericia en la denominada Cámara Gesell. Se trata de una entrevista tomada al niño por un profesional experto en una sala preparada para ese fin, y donde la criatura puede ser seguida en su relato por otros especialistas, entre ellos funcionarios de la Justicia.
También la jueza realizó una inspección ocular en el colegio. Fue en la semana previa a las vacaciones de invierno.
Si bien la magistrada —con el mismo argumento de protección del niño— no dio detalles del resultado de estas y otras actuaciones, coincidió en afirmar que «algo pasó».
Lo que hasta ahora no se ha logrado demostrar es que en ese hecho hayan intervenido adultos.
Por eso, la estrategia de la abogada de la familia del nene, Patricia Guzmán, es esperar que se reanude la plena actividad judicial (pidió que la causa se reabra en el receso, pero le fue negado) para solicitar que el expediente pase a un juzgado de Instrucción y se investigue a los mayores de edad acusados por la madre, además de otras imputaciones de esta familia, que incluyen «amenazas y disparos al frente de la casa familiar» (hay denuncia policial de estos hechos). Y que se haga otra Cámara Gesell ya que no los convence —a la letrada y a la familia— cómo se tomó la primera.
Derivar el caso a un juzgado de Instrucción quizás sea también la decisión que finalmente adopte la magistrada.
Por su parte, el Ministerio de Educación provincial también tomó nota del caso desde el vamos.
«De ninguna manera esto está cerrado para nosotros. Cuando se retomen las clases, seguiremos con una segunda parte de la investigación en el colegio», anticipó el director provincial de Enseñanza Privada, Germán Falo.
El funcionario no descartó que también se le dé intervención a la Secretaría de la Niñez de la provincia.
Por ahora, tanto la abogada que asesora a la familia como Falo coinciden —con distintos matices— en la necesidad de dar paso al trabajo de la Justicia para que, finalmente, se pueda determinar el abuso sexual denunciado, que tiene como víctima a un nene de 6 años.
Fuente: Diario La Capital.