El Concejo Municipal aprobó una serie de cambios en el sistema de taxis de Rosario que impactarán directamente en el bolsillo de los pasajeros y en la dinámica de los viajes urbanos. A partir de ahora, regirá una tarifa única para las 24 horas del día, y se habilitará una nueva tarifa promocional exclusiva para los viajes tomados directamente en la vía pública.
La tarifa tradicional ya no diferenciará entre días, noches, fines de semana o feriados. Según lo aprobado, la bajada de bandera se fijó en 2.117 pesos, mientras que la ficha cada cien metros y el minuto de espera costarán 89 pesos. Esta tarifa se aplicará de forma uniforme todos los días, en cualquier horario.
Pero la verdadera novedad está en la creación de una tarifa promocional, pensada para competir con el crecimiento de las aplicaciones ilegales como Uber y Didi. Esta modalidad solo se aplicará a viajes tomados “a mano alzada” en la calle, es decir, sin mediación de apps. La bajada de bandera costará 1.652 pesos y la ficha se reducirá a 78 pesos.
- Aún resta definir su implementación práctica, pero se prevé que los taxistas podrán activarla en fechas o eventos específicos —como recitales, Colectividades, Noche de Peatonales o salidas de boliches— y para ciertos grupos etarios.
Este nuevo esquema se suma a otras medidas recientes, como la tarifa flexible para aplicaciones habilitadas por el municipio, que permite cobrar hasta un 35% más o menos del precio oficial si el pasajero lo acepta previamente. El objetivo común es dar herramientas para recuperar competitividad frente a las plataformas ilegales que avanzan en Rosario, muchas veces con vehículos no habilitados pero que igualmente captan buena parte de la demanda.
Además, el Concejo aprobó cambios en el régimen de licencias y renovación de unidades. A partir de ahora, una misma persona (física o jurídica) podrá tener hasta 30 licencias, y los autos no podrán superar los 10 años de antigüedad. Para los titulares que renueven su licencia, habrá un plazo de 180 días para ajustar sus vehículos a esta normativa, que apunta a modernizar el parque automotor del sistema de taxis.
Con esta batería de medidas, el municipio y los concejales buscan actualizar el servicio, mejorar la competitividad frente a las apps y garantizar una experiencia más clara y accesible para los pasajeros.