Con el objetivo de contrarrestar el fenómeno creciente en las grandes ciudades de delitos que se cometen a bordo de motocicletas, el gobernador Omar Perotti firmó el decreto que le confiere más potestades a la Policía de Santa Fe para intervenir en situaciones de tránsito, y llegar a la retención del vehículo. En tres páginas se detallan las nuevas actividades que agentes policiales podrán realizar para detener rodados sin patente y secuestrarlos.
En el artículo primero, el gobernador autoriza a los agentes y funcionarios a disponer en la vía pública de tareas de identificación de personas que circulen en motovehículos y retener los mismos cuando quien conduce no pueda acreditar la titularidad del dominio o de su legítima posesión o autorización de uso.
Acto seguido la policía deberá dar a aviso a las autoridades locales para que tomen la intervención que les compete a los fines de la identificación de los motovehículos y su remisión, en caso de que corresponda.
El siguiente artículo menciona que los agentes de la Policía de la Provincia actuarán conforme las determinaciones que de manera reglamentaria define el Ministerio de Seguridad con intervención de la Agencia Provincial de Seguridad Vial y que tendrá a su cargo la coordinación con las autoridades locales a los fines de la correcta aplicación de la normativa.
Para finalizar, el tercer artículo del nuevo decreto provincial asegura que las modificaciones actuales no perjudican ni excluyen las demás atribuciones y deberes que prescribe la Ley Orgánica N° 7395.
Hasta el momento, los controles de tránsito quedaban a cargo de la Municipalidad y la fuerza provincial quedaba imposibilitada de accionar. Con la puesta en vigencia del decreto, la Provincia habilitó a los agentes policiales a hacer operativos de control o procedimientos en cualquier lugar y a cualquier hora en lo que respecta a motos que consideren sospechosas.