En una blindada Facultad de Derecho, entre la mañana y la tarde de este jueves se desarrolló una reunión organizada por la Asociación de Jueces Federales (Ajufe). El encuentro, que tuvo como consigna “El juzgamiento del narcotráfico”, contó con la participación del intendente Pablo Javkin y el gobernador Omar Perotti y fue encabezado por el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Horacio Rosatti, y sus colegas Carlos Rosenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda.
Jueces, camaristas, consejeros, miembros del máximo tribunal y una gran cantidad de invitados de todos los poderes del gobierno federal formaron parte del evento cerrado y que contó con tres anillos de seguridad en las afueras, en el centro rosarino.
- El propósito de la cumbre fue “dar una señal de acompañamiento a la Justicia Federal local en materia de persecución penal del narcotráfico”.
Tras la apertura del encuentro, se desarrolló un panel sobre la Investigación y juzgamiento del narcotráfico, cuyos exponentes fueron los camaristas Javier Leal de Ibarra y Aníbal Pineda; el juez federal Carlos Vera Barros; la jueza de la Cámara Federal en lo Penal Económico, Karina Perilli, y el juez federal de la localidad de Eldorado, Misiones, Miguel Guerrero.
Entre las frases salientes del evento, el gobernador Perotti pidió “más dureza en las penas y aislamiento en las cárceles” y dijo que “la situación por el narcotráfico no da para más”. En tanto, el intendente Javkin apuntó que “lo importante es la agenda de trabajo que queda acá” y valoró “que se jerarquice a Rosario dentro de la Argentina”.

Qué dijo Javkin
En la oportunidad, Javkin valoró “que se jerarquice a Rosario dentro de la Argentina”, y destacó: “Este no es un problema de la ciudad como muchas veces se trata, es un problema de la insuficiencia del Estado argentino para combatir el crimen organizado, y que lo manifieste el poder judicial en toda su estructura, la Corte, el Consejo de la Magistratura, fiscales y jueces de todo el país, es muy importante”.
“Lo importante es la agenda de trabajo que queda acá”, agregó el mandatario, al tiempo que anticipó que “en 10 días se concretará una sala multimedia para realizar los juicios y evitar el traslado de presos y las situaciones que hemos vivido y tener el nuevo sistema acusatorio”.
“La semana próxima habrá un proyecto unificado de todas las fuerzas políticas para fortalecer la justicia federal”, señaló y contó que este miércoles tuvo una reunión de trabajo con los titulares de la Procuraduría de Narcocriminalidad, el fiscal Diego Iglesias, y de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos, el fiscal Diego Velasco, en la que se habló “particularmente sobre lo que ocurre en Rosario, así como de sumar esfuerzos para la persecución del narcotráfico y del lavado de dinero”.
“Es muy importante tener actos como el que ocurrió hoy en Rosario, pero luego lo más importante es tener una agenda de trabajo diaria. Desde nuestra perspectiva como ciudad queremos que se entienda en el país, como se lo planteamos al presidente (Alberto Fernández), al presidente de la Corte Suprema (Horacio Rosatti), que acá necesitamos fuerte presencia del sistema federal de inteligencia, de persecución del delito, en el control de las cárceles, sobre lo que sucede en Rosario, y allí vamos a colaborar con gusto, es lo que venimos reclamando”, enfatizó.
“Acá no hay niveles del Estado, ni sector del Estado, ni mucho menos sector político que pueda enfrentar esto”, advirtió y prosiguió: “Hay experiencias renovables para entender qué se hizo bien y qué se hizo mal. Ojalá ocurra un acuerdo entre la corte y el Poder Ejecutivo para que tengamos una Agencia Federal que tome el tema en su integralidad donde estén el municipio, la provincia, el gobierno nacional, la UIF (Unidad de Información Financiera), la AFIP, los administradores de los puertos, la justicia federal, la provincial y los fiscales, y allí vamos a estar en la primera línea”.
“Muchas veces se tomó a Rosario como si fuera un enclave ajeno y, como bien se planteó acá, si un país no tiene un sistema para prisiones de alto riesgo, un sistema que permita desarrollar inteligencia criminal en la prevención de la movilización de activos o de ingresos de armas, no tiene una situación donde uno pueda perseguir movimientos internacionalizados de economía criminal dentro del territorio, evidentemente la situación termina en esto: la gente la pasa mal”, ahondó Javkin, para luego sintetizar: “Rosario tiene una situación muy compleja”.

Qué dijo Perotti
En la oportunidad, Perotti calificó la reunión como “muy positiva”, y recordó “la necesidad de una mayor presencia federal”. “Venimos diciendo desde hace mucho tiempo que la Nación no puede permitir que esto pase en su territorio, y ese territorio es la provincia de Santa Fe y la ciudad de Rosario, y que el accionar requiere de la Nación con su plena presencia en el territorio”, señaló el gobernador.
A continuación, dijo que “en nuestra provincia, no hay dudas que el delito avanzó y avanzó mucho. La única manera de combatirlo es no darle tregua. Que los jueces estén reunidos aquí y la presencia de la Corte en la ciudad de Rosario es un mensaje claro: que no se mira para otro lado”.
“Estamos sintonizados en la misma lucha. Cada uno tiene que hacer su parte. Nosotros empezamos diciendo que hay que cortar los vínculos del delito con el Estado. Seguimos avanzando, pero necesitamos de más fuerza. Esto no lo soluciona una sola persona, ni la provincia sola; esto es mucho más grande y estoy seguro que lo vamos a vencer entre todos”, añadió.
“La Nación no puede permitir que esto pase en su territorio, y tengo toda la voluntad de acabar con esta lacra que complica la vida a toda la buena gente, que genera miedo y quiere imponer el caos”, se explayó Perotti, quien agregó: “Sin dudas que la detención de narcos poderosos tiene consecuencias, como las amenazas que se viralizaron en los últimos días, tratando de imponer temor. Es una forma de amedrentar, de generar miedo para mantenerse en la impunidad en la que vivían”, amplió el mandatario santafesino.
Y remarcó: “No nos vamos a detener. La mayor parte de la fuerza policial lo tiene claro; son ellos que llevan adelante los allanamientos, las detenciones, y tienen la tarea de mejorar para cuidarnos mejor. Y si encontramos a alguien que se aparte de la buena senda, que favorezca alguna actividad narco, terminará compartiendo cárcel con exjefes policiales de épocas anteriores”.
“Quiero ser claro con esto -subrayó-: debemos estar todos del mismo lado. Saber, como dijo hoy el presidente de la Corte Suprema, de qué lado está cada uno. En esto, hay que estar del lado de la lucha contra estas lacras que lucran con la adicción de nuestros jóvenes y generan un mercado creciente”.
En paralelo, aseguró que “debemos seguir trabajando junto a las organizaciones sociales, junto a los pastores, los curas, los sindicatos, los empresarios; es fundamental para que tengamos más oportunidades para enfrentar mejor e integralmente la lucha contra la inseguridad”.
Para cerrar, el gobernador manifestó que “necesitamos más jueces y más fiscales que actúen y que manden a la cárcel a los delincuentes. Necesitamos más dureza en las penas y aislamiento en las cárceles; de nada sirve si hay condena y después terminan gerenciando sus negocios desde la cárcel. Hay que endurecer los sistemas de control de la vinculación con el exterior”.
Ministros
“Esto no se va a solucionar con fotos y reuniones, se soluciona con trabajo cotidiano, gris, profesional”, dijo Ricardo Lorenzetti, ministro de la Corte, que propuso crear una agencia de lucha contra el narcotráfico que integre a los tres poderes del Estado y se sinceró: “El problema es que no funciona nada. Hay una ineficacia generalizada, cada uno hace una parte y se pelea con el otro”.
“No se puede combatir el crimen organizado con un Estado desorganizado. La cohesión debe ser horizontal y también vertical: Nación, provincias y municipios”, dijo Horacio Rosatti, otro de los ministros, que admitió que “la indiferencia propició el avance del narcotráfico” y le pasó la cuenta a la política por el tema de las vacantes: “No se puede pretender combatir el narcotráfico y después no hacer lo necesario”.
