Mauricio “Mauri” Ayala, un conocido referente del narcotráfico en el oeste rosarino, fue detenido este lunes en Roldán tras permanecer prófugo durante un año y medio. Su captura fue el resultado de una operación conjunta entre la Central de Inteligencia y Operaciones Policiales Especiales (CIOPE) y la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), tras un seguimiento minucioso de autos y personas.
Ayala era uno de los objetivos prioritarios del Ministerio de Seguridad de Santa Fe por su presunto rol como organizador de una estructura criminal vinculada al narcomenudeo y a una causa de alto impacto institucional: está sospechado de haber entregado armas a policías provinciales que luego fueron utilizadas para incriminar a miembros de una banda narco rival, en el marco de una investigación por atentados y amenazas que tuvo gran repercusión a fines del verano 2024.
- El operativo que culminó con su detención se desarrolló sin resistencia, luego de tareas de inteligencia en tiempo real que permitieron cercar al prófugo cuando se movilizaba por la ciudad de Roldán.
El gobernador santafesino Maximiliano Pullaro se hizo eco de la noticia a través de sus redes sociales: “Este es resultado del trabajo serio y coordinado de las fuerzas especiales de inteligencia criminal de la Policia de Santa Fe. En la Invencible no hay lugar para la impunidad. Vamos a seguir yendo a fondo contra el narcotráfico y el delito para que los santafesinos vivan en paz”.
“Mauri” Ayala, perteneciente a la estructura de Matías Gazzani, quien se encuentra prófugo y es señalado como líder de “La Banda de los Menores”, manejaba la comercialización de estupefacientes en la zona de Villa Urquiza. También se le atribuye tener vinculaciones con Pablo Nicolás Camino y con la Mafilia, otra banda narco.
Asimismo, desde la puesta en vigencia de la Ley de Microtráfico, dos puntos de venta de estupefacientes que fueron derribados en los meses de enero y febrero de este año ubicados en Riobamba al 5000 y 5500, habrían estado vinculados a Ayala.
La caída de Ayala se produce más de un año después de un allanamiento frustrado que lo tuvo como blanco en Tierra de Sueños 3, un barrio residencial de esa misma localidad. Aquel 9 de marzo de 2024, por orden del fiscal Franco Carbone, la TOE irrumpió en una vivienda de Esperanza al 1100 en busca de Ayala. El procedimiento no dio con el prófugo, pero derivó en un hallazgo inusual: una decena de animales —entre ellos cabritos, pollos, palomas y un ternero— que iban a ser sacrificados en un ritual umbanda. Por ese hecho, fueron notificadas varias personas, entre ellas la hermana y un allegado de Ayala, y se incautaron teléfonos y elementos de interés para la causa.
Condenado por tentativa de homicidio y señalado como responsable de varios búnkeres en el oeste de la ciudad, Ayala también está bajo la lupa de la Justicia Federal por su crecimiento en el circuito narco mientras permanecía oculto. Durante su tiempo prófugo, pasó de ser un “transero” de barrio Bella Vista a tener línea directa con proveedores internacionales de droga, según fuentes de la investigación.
La Fiscalía Federal, a cargo de Matías Scilabra, continúa ahora con la investigación para determinar el alcance de su estructura criminal y los vínculos con otros actores, incluidos los efectivos policiales presos por la maniobra de las armas plantadas.
Este es resultado del trabajo serio y coordinado de las fuerzas especiales de inteligencia criminal de la Policia de Santa Fe. En la Invencible no hay lugar para la impunidad.
— Maximiliano Pullaro (@maxipullaro) June 9, 2025
Vamos a seguir yendo a fondo contra el narcotráfico y el delito para que los santafesinos vivan en… https://t.co/6GzYnNLrfF