“Hoy recuperamos un patrimonio que revitalizará el centro de la ciudad”, expresó el intendente Pablo Javkin al inaugurar la restauración de la fachada de la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). El emblemático edificio luce renovado desde hace unos días luego las obras a cargo de la restauradora María Eugenia Prece.

La especialista rosarina, graduada en Bellas Artes en la facultad y especializada en restauración arquitectónica en la Universidad de Alcalá de Henares (España), plantea la posibilidad de encontrar “múltiples símbolos de un edificio de más de cien años” y “establecer a la puesta en valor de construcciones históricas como dinamizador económico a futuro”.

La obra demandó un año y ocho meses y estuvo a cargo del Área de Restauración de Edificios de Valor Patrimonial de la UNR, con la coordinación de la Dirección de Infraestructura Humanidades y Artes de la facultad.

• Se trata de la única fachada rosarina del neogótico escocés. El frente de Entre Ríos 758, proyectado por el arquitecto inglés Arthur Inglis y levantado entre 1902 y 1903 por Felipe Censi es el único edificio de la ciudad concebido en un estilo neomedieval de matriz escocesa, “muy poco frecuente en la Argentina”.

Los edificios históricos de Rosario que son de la época del edificio de la Facultad de Humanidades, cuenta Prece, están construidos en símil piedra “tratando de imitar las construcciones de ese estilo”.

Para la restitución de la fachada, utilizaron el método de proyección de micropartículas, que consta en testear áridos de distintas durezas hasta encontrar cuál es el que daña menos la superficie, para limpiar la pintura que se usó sobre la estructura, pero sin estropearla.

En Humanidades se empleó bicarbonato de sodio con agua a través del uso de una máquina especial que permite que los elementos se complementen para que el árido salga por un lado y el líquido por otro, en forma secundaria y sin la presión que podría tener una hidrolavadora, según explica Eugenia: “Se va removiendo y enjuagando. Muchas veces, esa salinidad hay que neutralizarla con agua destilada”.

“Acá pudimos entender la forma para reconstruir la fachada”, dice Prece, quien conoce bien el edificio ya que es graduada de la facultad y lleva más de 20 años en el rubro de la restauración arquitectónica, en donde se sumergió gracias a un libro en particular, que la llevó a estudiar junto al autor del mismo.

“Lo más importante para conservar un símil piedra es que no se moje, porque se degrada más rápido. La lluvia de hoy no es la de hace 100 años, sino que es una lluvia ácida que corroe muchísimo más. Los edificios, antes, duraban miles de años porque no teníamos estas condiciones ambientales; lo que antes se deterioraba en mil años, ahora se deteriora en 10”.

Del acto participaron el gobernador Omar Perotti y el senador departamental Marcelo Lewandowski, además del diputado provincial Rubén Giustiniani, el secretario de Cultura local Dante Taparelli, el rector de la UNR y los decanos.

REDESCUBRIR LA BELLEZA DE LA FACHADA DE HUMANIDADES Y ARTES: UN SUEÑO CUMPLIDO

Un día mágico, un sueño colectivo cumplido. Inauguramos la fachada histórica de @hya_unr, completamente restaurada y brillando en todo su esplendor. pic.twitter.com/lWaT3VOoDk

— Franco Bartolacci (@fbartolacci) September 5, 2021

Intendente

El intendente Javkin recordó su juventud, en la que llegó a dormir en el edificio. “Esta facultad tiene mucho de nuestros recuerdos de lucha. La universidad en el corazón de la ciudad. Este edificio es una conjunción de probablemente cómo se hizo esta ciudad, esta conjunción de nacionalidades, entre lo religioso y lo laico, debe ser nuestra facultad más fuerte en eso pero está en un convento. Gran parte de nuestra cultura, letras y el arte”, expresó.

“Refleja la historia de la vida de una ciudad reflejada en un punto del mapa y además tiene un enorme valor arquitectónico. Tenemos la larga tradición de que nos llueva cuando hacemos un acto en la calle pero por suerte aguantó. Este acto recupera vernos, hace unos meses hubiera sido por zoom, nos permite participar del acto porque marca un quiebre al ser uno de los primeros actos de inaugurar un pedacito de su trama urbana con la gente viviéndolo, en un momento muy especial para la universidad que va a recuperar la presencialidad”, destacó.

“Uno de los grandes desafíos que tenemos de ‘volver a Rosario’ es recuperar toda nuestra área histórica, que está lleno de estas joyas. Si uno camina hasta el río va a encontrar con una serie de edificio patrimoniales. Hay que recuperar ese espíritu forjador del sector privado que veía en la arquitectura urbana un legado para la ciudad mayor que la de construir solamente”, añadió.

“Es un gran aporte de la universidad porque tenemos el desafío de recuperar el patrimonio de nuestra área histórica, de nuestro casco céntrico. La punta la está haciendo la universidad pública, porque este es uno de los primeros pasos. Vamos a tratar de empezar a recuperar la vida de noche en nuestro centro y ya lo haremos con la recuperación de la presencialidad al menos en parte”, manifestó Javkin.

Por último, destacó el avance del operativo de vacunación y auguró: “Hoy podemos mirar lo que viene para reconstruir, en esa tarea nada mejor que nuestra universidad nos permita dar ese primer paso. Ojalá pronto podamos ver a la universidad llena de gente y espero que esta generación no tenga que dormir acá”.

Restauradora

A su turno, María Eugenia Prece agradeció “la oportunidad de ser parte de un equipo magnífico que generó este proyecto urbanístico de vanguardia por el hecho de que implica muchas cosas”. “No es solamente la recuperación de un edificio histórico sino es todo un proyecto integral que deviene en un montón de sinergias interesantísimas”, expresó emocionada.

“Cuando estaba trabajando en el tablón pensaba ‘qué curioso que una congregación de hermanas francesas haya convocado a un arquitecto escocés para que en la ciudad de Rosario construya un edificio que hizo un italiano para educar a unas niñas rosarinas’. Cincuenta años después, la universidad compra este edificio para hacer una universidad pública, laica, gratuita, y esto da cuenta de esta multiplicidad que somos y que los edificios mantienen viva esta historia, por eso es importante conservarlos. No solo el edificio sino sus símbolos, su ornamentación, sus características originarias, como son que este edificio que estaba pintado y no se podía ver, volver a recuperar su materialidad que es símil piedra”, precisó.

“En las redes sociales vi que lo asemejaban a un castillo de cuentas de hadas. Es un poco mágico, provoca un encantamiento. A mí me pasó durante toda la obra. Tendemos a creer que la conservación de edificios es un gasto que hay que asumir, pero es una inversión que da lugar a muchísimas cosas más que son dinamizadores económicos”, explicó.

En esa línea, contó: “Empezamos a desarrollar la posibilidad con el Conicet de hacer productos específicos para la restauración, productos con un alto valor agregado que hoy en día se pone muy a prueba porque se trata de un hidrofugante. Si no lo tuviese estaría toda la fachada manchada y no está así gracias a que usamos un producto de estas características que tuvimos que importar. Con los institutos del Conicet vimos la posibilidad de desarrollar un producto nacional y llegamos con unos subsidios de la Universidad a desarrollar una fórmula de laboratorio que funciona muy bien, es muy superador porque está basado en nanotecnología”.

Rector

Franco Bartolacci, rector de la UNR, señaló que se trató de “un día mágico, un sueño colectivo cumplido”. “Redescubrir la belleza de la fachada de Humanidades y Artes es un sueño cumplido. Redescubrimos y recuperamos una obra maravillosa de estilo neogótico escocés, única en nuestra ciudad y en nuestro país. Un gran orgullo rosarino y santafesino”, expresó.