A casi un año de que la concejala María Eugenia Schmuck presentara un proyecto para la instalación de cámaras en el exterior de los boliches de la ciudad “para prevenir y evitar situaciones violentas”, con la finalidad de proteger a los jóvenes que asisten a los locales nocturnos y vecinos de inmediaciones, la propia edila radicala recuerda la medida a raíz de los incidentes que se desarrollaron en las últimas semanas.
Schmuck reiteró que el objetivo del proyecto “es mejorar los esquemas preventivos y facilitar una rápida intervención del personal de seguridad pública. De esta manera, garantizamos mayor tranquilidad a los vecinos y también a los jóvenes, desalentando hechos y actos violentos que permitirán cuidar de su seguridad. Además, se puede promover un mejor control de los organismos respectivos”.
“Las cámaras deberán estar conectadas al Centro de Monitoreo Municipal, dependiente de la Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana, quién tendrá la responsabilidad de informar y actuar rápidamente para evitar situaciones violentas” profundizó la concejala.
“Con este proyecto intentamos realizar un aporte que permita evitar -a través de la prevención y disuasión- la escalada de hechos de violencia que se generan afuera de los boliches, así como garantizar un elemento más de control de la actuación del personal de seguridad de los locales nocturnos”, finalizó Schmuck.
La edila recordó que «este año creció notablemente la cantidad de denuncias efectuadas por vecinos, muchas de las cuales llegan también al Concejo. En la mayoría de los casos, se trata de reclamos por ruidos molestos, tergiversación de rubro, venta de alcohol en horario prohibido y presencia de menores en espacios para mayores. También, por disturbios en la vía pública, que son cada vez más frecuentes».
Ay Ramírez, Yamper y El Diablo son locales que acumularon denuncias de vecinos, muchas de las que fueron canalizadas por el Concejo, que solicitó actuación de la Dirección de Inspecciones.