La lluvia fue protagonista del empate entre Newell’s y Quilmes en el Centenario. La Lepra, que venía de caer por goleada ante Banfield, levantó un poco su imagen con una igualdad por 1-1 en una cancha que estuvo muy afectada por el temporal y sumó una unidad en un partido que empezó ganando pero que no pudo sostener.
De entrada fue más el equipo de Gustavo Raggio. Un zurdazo de Maxi Rodríguez amenazó el arco local, pero se fue apenas desviado. Los charcos impedían el juego al ras del piso y Quilmes se sentía más cómodo con ese factor.
Gonzalo Klusener fue una verdadera amenazada para una zaga central rojinegra que nunca hizo pie: Leandro Fernández y Guillermo Ortiz (reemplazó a Víctor López, con una fatiga muscular antes del juego).
Cuando el local se hacía fuerte y complicaba a Oscar Ustari, Newell’s respondió. A los 30’, Ustari rechazó un tremendo tiro libre de Sebastián Martínez que se metía; dos minutos más tarde, Maxi Rodríguez aprovechó una distracción de la defensa quilmeña y la empujó ante la inútil reacción de Silvio Dulcich.
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Sin embargo, pasados los 40’ Klusener complicó con un frentazo que sacó Ustari al corner y, a partir de ese saque de esquina, el ex atacante de Talleres tomó un rebote desde el borde del área y con un delicioso disparo con cara interna la colgó en el ángulo para equilibrar el resultado.
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Ya en el complemento, una falla antes del minuto de juego casi pone al frente a los de Pablo Quatrocchi: el paraguayo Adrián Fernández aprovechó un blooper de los zagueros leprosos y lanzó un potente zurdazo que salió muy cerca.
Newell’s adquirió mayor protagonismo en la segunda mitad, teniendo en cuenta que el local había sido más claro y punzante en el primer período. A través de Maxi Rodríguez y las proyecciones de Milton Casco, la Lepra insinuó pero Adrián Fernández volvió a tener la más clara: a los 18’ dominó dentro del área menor y definió suave pero Ustari se encontró con la pelota y rechazó lo que era el segundo gol local.
Ni el ingreso de Mauricio Tevez (volvió luego de más de un mes) pudo torcer el rumbo. Un nuevo remate de Maxi complicó a Dulcich (quien sobre el final salió lesionado) pero salió pegado al palo izquierdo.
Llegó el final del partido y otra vez Ustari fue fundamental para sostener la igualdad como visitante. Se trata de un punto valorable por cómo se dio el partido y luego de una goleada en contra ante Banfield la fecha pasada. Los de Raggio recuperaron algo de juego y si bien sufrieron por otra mala actuación defensiva, sumaron y aspiran a seguir en carrera por el campeonato.