20 C
Rosario
martes, marzo 18, 2025

Maxi Rodríguez: "El anhelo es ganar la Copa"

nob
Maximiliano Rodríguez es una de las tantas voces de experiencia que tiene Newell’s. Es el mejor jugador, no sólo del equipo sino del fútbol argentino. Eso quedó reflejado con todos los premios que le adjudicaron después de un 2013 bárbaro en lo personal. Hoy está enfocado en lo que viene y analiza el campo de acción. Y lo hace con una claridad valiosa. «Se puede pelear en todos los frentes, pero hay que tener un plantel amplio.
Hoy no lo tenemos, es muy corto. De todos los años que estoy en Newell’s puede ser el más corto», define con palabras la situación en el inicio de la charla a solas con Ovación, donde también dejó en claro que al equipo le hace falta «una línea media entre jóvenes y grandes», que «a los chicos hay que llevarlos de a poco sin cargarlos de mucha responsabilidad» y que más allá de todo eso «el anhelo es ganar la Copa». Claro que a lo largo de la entrevista también ratificó una vez más su idea de cerrar su carrera en el club porque «mi cabeza está en Newell’s» y de la selección dijo que el grupo es bárbaro porque todos saben que la estrella es Messi.
La Fiera clava la mirada y se apresta a escuchar las preguntas. Responde rápido y con esa precisión que lo destaca en las canchas. Tiene claro lo que se asoma en el horizonte, que no será tan fácil. Aunque también es consciente de que todo dependerá del fútbol y el rendimiento que imponga el equipo. «Será un torneo muy duro porque arranca la Copa, pero se inician nuevas ilusiones y sueños para todos. Hay que estar bien en todos los sentidos, tanto física como mentalmente porque la exigencia será intensa y no habrá que tener descuidos. En la alta competencia no podés regalar nada».
—Siempre se habla de lo complicada que es la doble competencia, pero el año pasado fueron protagonistas y eso indica que se puede luchar en todos los frentes.
—Se puede, pero hay que tener un plantel amplio y hoy no lo tenemos. Es muy corto y de todos los años que estoy en Newell’s puede ser el más corto. Sobre todo porque vendrán cuatro meses exigentes, así que todos deberán estar al ciento por ciento y que nadie se pierda ningún partido. Es difícil que en la alta competencia estén todos porque siempre por algo alguien se cae. La exigencia la tenemos que meter nosotros y afrontar algo muy lindo como jugar el torneo y la Copa. Esperemos estar a la altura de esas circunstancias.
¿Están atentos con la posible llegada de refuerzos?
—En lo personal no pienso en eso, si vienen que se acoplen al grupo, que sean útiles para lo que pide el entrenador y se metan en el equipo, que ya tiene una identificación. Si no viene nadie habrá que apostar a los chicos de las inferiores. Hay muchos y es difícil volcarles la responsabilidad y por eso deben ir de a poco.
—En la ofensiva está Trezeguet y después viene Ponce, quien tiene 16 años. ¿Coincidís con que falta alguien que tenga una edad intermedia?
—Las responsabilidades pasan por los más grandes y como vos decías hay grandes con mucha experiencia y de ahí saltás a los más jóvenes. Creo que el equipo se queda sin la línea media que se necesita para ser el enlace entre grandes y chicos. La mayoría de los que no tenían mucho ritmo lo están sumando y deben acoplarse para que todos juntos saquemos adelante el equipo.
—Empezaste jugando de nueve en los amistosos más allá de que la posición no es fija. ¿Cuando no esté Trezeguet vas a jugar ahí?
—Sí, al no estar David lo hice como un nueve mentiroso. Hay que ver las características de cada uno, se sabe que rotamos permanentemente. En estos partidos me toca ser el 9 desde el inicio. Hay que ver cómo me adapto y si puedo ser útil.
—Lo mejor es que más o menos la base se conserva y hay una línea de juego implementada más allá de la falta de refuerzos.
—Sí, en todo equipo cuando pasan los torneos la base debe mantenerse, pero siempre se necesitan sumar refuerzos que vayan acompañando, sobre todo cuando hay mucha competencia. Cuando juegan siempre los mismos a la larga el cuerpo te pasa factura. Hoy estamos preparándonos para estar bien y aguantar los cuatro meses intensos.
—La gente se acostumbró a los buenos torneos y no siempre resulta fácil repetirlo. Es ahí donde debería aparecer la paciencia.
—Claro, hace un año y medio que peleamos todo. Es normal que la gente se acostumbre. Nosotros también queremos luchar y llegar a la final de todo. Habrá momentos en que las cosas no saldrán y entonces tendrá que surgir la paciencia tanto nuestra como la de los dirigentes y el público. Ahí se necesitará de todos.
—Cuando volviste dijiste que tu gran sueño era salir campeón con Newell’s y lo conseguiste. ¿Y ahora qué?
—Todo va aumentado. Esto lo hablé con compañeros de la selección y les decía que cuando uno llega al sueño es como que se relaja. En este caso no, uno quiere seguir logrando títulos y ahora está el anhelo de la Copa más allá de tener un plantel corto. La idea es llegar hasta la última instancia con opciones de pelear algo. Hoy queremos pensar en clasificar en la primera fase de la Libertadores y en el campeonato tener un buen arranque. Siempre los objetivos deben ser cortos.
—¿El dolor por lo sucedido en la Copa del año pasado se intensifica con el tiempo teniendo en cuenta de que estuvieron cerca de ganarla?
—Y… eso sucede. Dependíamos de nosotros y muy pocos lo podían decir. En esa competencia el mínimo error lo pagás caro. Fuimos con buena diferencia a Brasil, pero son cosas que tiene el fútbol. A veces necesitás ligar un poco.
—Hoy se habla del grupo de la muerte, pero en el anterior era accesible y con Lara perdieron. Un ejemplo de que no todo es fácil.
—No, hoy se emparejó mucho el fútbol. Cualquiera le puede ganar a cualquiera. A veces te tocan grandes nombres y pasás sin problemas. Hay que hacerse fuerte de local y sumar afuera también.
Fuente: Diario La Capital

Seguinos

50,531FansMe gusta
33,480SeguidoresSeguir
19,116SeguidoresSeguir

MÁS LEÍDAS