Newell’s comenzó con el pie derecho su participación en el campeonato con una gran victoria en condición de visitante sobre Boca, con un gol del juvenil Mauricio Tevez, quien hizo su debut y le dio el triunfo al equipo de Gustavo Raggio, quien apostó por el delantero de 17 años en La Bombonera.
En el cierre de la primera mitad, a los 48’, un error del lateral Hernán Grana permitió la aparición de Tevez por derecha, quien lanzó un violento remate cruzado y batió el arco de Agustín Orion, quien no pudo sacar la pelota.
Si bien Boca fue el dominador del juego a través de la posesión de la pelota, la Lepra aprovechó los errores defensivos del local, que falló una y otra vez y permitió por ejemplo varias acciones protagonizadas por Maxi Rodríguez, quien no estuvo fino en la definición pero sí participativo en las mejores ocasiones rojinegras.
La lesión del lateral Marcos Cáceres promediando la mitad del primer tiempo obligó a Raggio a hacer debutar al zurdo Claudio Corvalán, pasando Cristian Díaz a la franja derecha de la defensa. Al parecer, el paraguayo sufrió una luxación de codo.
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Boca apenas inquietó a Oscar Ustari, de correcta tarea, a través de un zurdazo del ex Central Federico Carrizo, uno de los mejores de Boca, aunque de irregular participación en el juego xeneize.
El ingresado Corvalán tuvo el gol en una gran jugada colectiva leprosa pero Grana, quien previamente había perdido la marca, evitó la conquista en la línea del arco.
Cuando se iba el primer tiempo, el juvenil Tevez aprovechó una falla defensiva para romperle el arco a Orion con un gran remate, que significó su debut con gol en la Primera de Newell’s.
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En el complemento, el elenco de Raggio se refugió e intentó salir de contraataque frente a un rival predecible y que no supo complicar a la defensa rojinegra. Coti Fernández, que retornó al club, mostró graves fallas en el juego por el piso.
De hecho, Maxi Rodríguez volvió a contar con una ocasión para liquidar el juego luego de una precisa asistencia del ingresado Víctor Figueroa. El triunfo de Newell’s nunca corrió peligro y con algunos centros el once de Bianchi anheló alcanzar una igualdad que se fue alejando con el correr de los minutos.