Alejada del día a día de la política, Elisa Carrió reapareció para cuestionar fuertemente la política económica del gobierno de Javier Milei. “Estamos frente al mayor ataque a la clase media de la historia”, afirmó. “Es una bomba atómica; se liberaron los precios pero no se adecuaron los salarios y las jubilaciones. Es un ataque furibundo con el objetivo de la desaparición de la clase media”, agregó.
“Hay un ataque furibundo que tiene por objetivo la desaparición de la clase media. (Milei) es buen actor y entretiene bien a la gente. Es un gran actor, habla de la SUBE, o se pelea con alguien, pero en el fondo está lo que sucede con la clase media. Están las facturas de luz, de gas; ves cierres de negocios y el que se cae no comienza de nuevo. No hay un punto en V, hay una U muy larga y no hay un programa de estabilización con crecimiento. No hay modelo para las pymes: es un pymecidio, porque suben todos los costos, los sueldos, pero tenés una recesión brutal”, afirmó la ex diputada y quien fue una de las fundadoras de la alianza Juntos por el Cambio.
Y añadió en tono crítico: “(el ministro de Economía, Luis) Caputo dice, ahora me enfrento con las prepagas. Señores, enfréntense con los laboratorios, que crecieron 3200% y pico de inflación en los últimos años. ¿Por qué no discuten también con los laboratorios? Las prepagas se cartelizaron y nosotros lo denunciamos con Hernán Reyes. La verdad es que los medicamentos son imposibles”.
“Para un jubilado, no estoy hablando de 205, para un jubilado como uno que tiene 700 mil pesos, que tiene que tener 3 o 4 trabajos distintos y no sabe cómo abre el estudio, todo, para poder solventar el mantenimiento nada más que de una casa, no para otra cosa, es imposible. Entonces yo pienso que estamos frente al mayor ataque a las clases medias y esta es la identidad argentina”, profundizó.
Sobre el rumbo económico, la dirigente fundadora del ARI y la Coalición Cívica, dijo: “Yo en la historia no vi este ataque y, además, vi otros programas de ajustes así, que terminaron en recesiones brutales sin poder salir de esa recesión, como fue el de Machinea durante Fernando de la Rúa. Es decir, los ajustes, estos enormes ajustes y un alto nivel de impuestos, no llevan a la salida de la Argentina sino hay un programa de crecimiento con las pymes”.
“Estoy viendo la caída de las ventas, ¿cómo se sostienen los empleos?, ¿cómo vamos a crear empleo formal, si lo que vamos a tener es gente que va a vender en negro, que no va a pagar impuestos, que va a vender en negro y va a contratar en negro?, porque no puede, porque ustedes ven que la clase media, por ejemplo, empieza a dejar de dar propina, empieza a dejar que le corten el pasto, empieza a dejar de hacerse las manos. Parecen tonterías, pero es la vida cotidiana, y hay miles de trabajadores, millones de trabajadores autónomos que viven de todos esos servicios, esos están cayendo, y esa gente no tiene plata en el colchón”, agregó en declaraciones a radio Mitre.
Asimismo, evaluó que “en todos los niveles vamos a un ajuste en el Estado, a la desaparición de algunos roles del Estado. En las consecuencias se habla de calles privadas y no públicas; de seguridad privada y no públicas. En el fondo, está buscando una mayoría para ir hacia esa idea, esa utopía”.