Los arrestos se llevaron a cabo gracias a operativos de las Divisiones de Homicidios, Operativa e Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal en Vía Honda, Puente Gallego y la zona noroeste de Rosario. El fiscal Alejandro Ferlazzo los imputará en una audiencia programada para el próximo martes.
Se investiga si los arrestados tienen vinculación con la presunta banda liderada por el clan Romero, que opera en la zona norte y que fue desbaratada por la División de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal, lugar en el que trabajaba la víctima, en una causa por el homicidio de un dirigente de la Uatre, ocurrido en noviembre del año pasado en Buenos Aires.
El principal sospechoso, Agustín Alfredo A. (de 22 años), fue encontrado en una casa ubicada en Piamonte al 1900, en el barrio Puente Gallego. Se le atribuye la autoría de los disparos contra el inspector que tuvieron lugar el jueves pasado en la puerta de la AIC, situada en Lamadrid al 500. Agustín A., apodado «Calamar», ya estaba siendo buscado por una orden de captura emitida por el Juzgado N° 1 de Garantías de Pergamino debido a su presunta participación como sicario en el asesinato de Mauricio Cordara, un miembro de la Uatre, en Colón, provincia de Buenos Aires.
Cabe destacar que Agustín A. es hijo de un policía que fue detenido en enero de 2014 por su supuesta implicación en la facilitación de la fuga de un miembro de la banda «Los Monos» desde el edificio de la Jefatura de la Policía a cambio de dinero. Posteriormente, este ex agente también fue interceptado en conversaciones telefónicas relacionadas con un intento de planificar el asesinato del juez Juan Carlos Vienna, quien había liderado el caso contra los integrantes de la banda «Los Cantero».
Por otra parte, Alan Nahuel A. (22), fue detenido en un allanamiento hecho en Camilo Aldao al 3800, en Vía Honda. Y Fernando C. (22) fue aprehendido en José Ingenieros al 8300, en la zona noroeste de Rosario, a quien se le incautaron pasamontañas, precintos, ropa y un celular que será enviado a peritar.
Por los indicios que tienen los investigadores, Fernando C. fue quien rompió una de las ventanillas del Fiesta Kinetic de Carmona para llevarse una mochila, ya que tenía heridas en una mano. Ese robo creen que fue cometido con el único objetivo de desviar la investigación.
La pista de que Fernando C. había sido quien rompió uno de los cristales del Kinetic radicaba en que se habían encontrado manchas de sangre en el C3 en el que se desplazaban los atacantes y que fue encontrado sin ocupantes en Sánchez de Bustamante al 400.
Los tres sospechosos, según los datos que tiene los investigadores policiales, después de abandonar el C3 se subieron a un Gol Trend gris para terminar de fugarse. El Gol fue secuestrado este sábado a la madrugada en Caracas y Grandoli, en Nuevo Alberdi, territorio en el que opera hace años la presunta banda conocida como “Los Romero”.