Uno de los presuntos integrantes de la célula que opera para el clan Los Monos en la zona noroeste rosarina fue arrestado en el marco de un operativo a la salida del partido que jugó Central de local en el Gigante de Arroyito. Se trata de Oscar Omar Ramírez, alias «Nenu», que se encontraba en calidad de prófugo dentro de la causa por asociación ilícita que liderarían los presos Mauro Gerez, Andrés Benítez y Julián Aguirre.
Según trascendió, Ramírez pernoctaba en distintos domicilios desde que pesaba sobre él un pedido de captura. Pero no dejó de ir a la cancha. Esa situación, similar a la de la famosa escena de la película «El secreto de sus ojos», llevó al fiscal del caso y a la División Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal a montar un operativo dentro del Gigante y en cercanías del estadio para el momento de la descongestión de la hinchada post partido.
«Nenu» cayó en un complejo Fonavi de barrio Rucci, cerca de la vivienda de un familiar. Será llevado a audiencia imputativa por integrar la presunta asociación ilícita; además, se le atribuirá haber planificado la redacción de los panfletos intimidatorios apuntados a fiscales y que fueron dejados a principios de septiembre en distintos edificios públicos como el Centro Municipal de Distrito Sur, el Policlínico Pami II y la sede de la Agencia de Investigación Criminal.
El padre de Ramírez, de 61 años, fue demorado y luego liberado a la salida de la cancha. Eso fue porque iba al volante de un Fiat Cronos rojo que habitualmente manejaba su hijo y los investigadores interceptaron el vehículo en Alberdi y French.
«Nenu» Ramírez, según la causa que instruye el fiscal Pablo Socca, es cuñado de Jonatan Almada, imputado como una suerte de «gerente» de la asociación ilícita comandada por Mauro Gerez, Julián Aguirre y Andy Benítez. El grupo fue imputado este año por llevar a cabo las extorsiones, balaceras, crímenes y otros delitos en el ámbito de Empalme, Ludueña e Industrial.
En tanto, Almada fue imputado la semana pasada de haber pergeñado una repartija de panfletos con amenazas a los fiscales Matías Edery y Pablo Socca.
Según investigadores, desde julio de 2021 la banda de Gerez –vinculada con Los Monos, comandada por la familia Cantero– estaba enfrentada a la de Fran Riquelme –cercana a Esteban Lindor Alvarado– por el control y dominio del territorio, donde cada una de ellas procuraba excluir a la banda antagónica.
Fuentes: Rosario3.com e Infobae.
