Los delincuentes simulan ser empleados de la EPE (Empresa Provincial de la Energía) y manifiestan que necesitan ingresar a los domicilios para controlar los medidores de energía, con la excusa de que habría una falla eléctrica en la propiedad. Por ello, solicitan el libre acceso a la vivienda.
Esta simulación es al solo efecto de que los propietarios de las casas abran sus puertas a los supuestos empleados y, una vez adentro, consuman el hurto mediante maniobras de distracción.
Frente a tal situación, se indica a la población que solicite credencial y datos personales de las personas que se presentaron en su domicilio, llamar directamente a las instituciones de las que dicen ser empleados, llamar a un familiar cercano y consultar los pasos a seguir y no abrir la puerta a ningún empleado hasta no estar seguro que pertenezca a la empresa.