Por Franco Abba.
No es medicina, no es ciencia, pero No Te Va Gustar le llega a los rosarinos. A través de la penetrante voz de Emiliano Brancciari, la banda uruguaya volvió a hacer vibrar a miles de fanáticos, que acompañaron por primera vez en la ciudad al grupo desde la partida del tecladista Marcel Curuchet.
NTVG volvió a brindar un show impecable con un atrayente juego de luces e imágenes por detrás y a los costados del escenario del salón Metropolitano, que lució colmado de espectadores. Y, minutos antes de la presentación, tocaron los también orientales La Triple Nelson, que aportaron un furioso rock y resultaron una buena antesala para el evento principal.
Debajo de una figura de un cubo de hielo con un fósforo adentro como en la tapa del CD que presentaban y realizando un repaso de los temas del propio El calor del pleno invierno junto con los más antiguos e improvisando durante algunos minutos por una falla en las luces, los uruguayos dejaron a todos satisfechos.
Tal vez la exclusión de “Desde hace un sueño” y “Mil días” del último disco llamó la atención pero la situación pasó desapercibida con clásicos como “La soledad” y trozos de “Voy”, “Voces del tiempo” y “La única voz”; otras canciones que no figuraron en el repertorio de la banda fueron “Arde”, “Cielo de un solo color” y “Cómo brillaba tu alma”.
Sin embargo, con una destacada performance en el escenario y el constante apoyo de sus fans, No Te Va Gustar volvió a dar cátedra y prometió volver a la ciudad más allá del show que brindará este domingo 28 con localidades nuevamente agotadas.
Los puntos más altos de la noche volvieron a sembrarse con “No hay dolor”, “El camino”, “Al vacío”, “Pensar, “No era cierto”, “Fuera de control” y a todos estos ya clásicos temas de los montevideanos, se sumó la reciente “Religión pagana”, una oda a la música que llegó a los corazones ntvgeros, que acompañaron en Rosario a un nuevo espectáculo de primera línea.