Central le ganaba un partidazo a River, pero se fue quedando en el complemento y la reacción de la visita derivó en el empate. Fue un intenso 2-2 en el que Marco Ruben hizo historia con un doblete que lo erige como el máximo goleador de la historia del club de Arroyito, con 99 conquistas. Agustín Palavecino fue el encargado de los dos goles del Millonario, que así equilibró y se llevó un empate una fecha después de ser campeón.
Por el rival, un punto no es despreciable. Pero por cómo se dio el partido parecía que el conjunto del Kily González podría sumar tres puntos importantes en el objetivo de meterse en la Copa Sudamericana 2022; ahora tendrá que ganar y esperar otros resultados para intentar sacar pasaje internacional.
El Canalla salió decidido a plantarse de igual a igual ante el mejor del torneo y de hecho fue el dominador del terreno de juego con presión en la salida visitante y con juego asociado. El Millonario descomprimía con salidas largas y la velocidad de sus delanteros para inquietar.
Pero promediando la etapa inicial llegó el primer grito de la tarde: una delicada maniobra de Emiliano Vecchio y un exquisito taco de Ruben puso arriba a Central para desatar la locura en el estadio. La conducción del enganche y la resolución del goleador, una marca registrada.
En el inicio del complemento apareció nuevamente Marco Ruben con un cabezazo al fondo de la red tras un preciso centro de Lautaro Blanco para el 2-0 que parecía sentenciar la historia y que le dio al goleador la punta de la tabla de artilleros históricos del club con 99 dianas. Festejó colgándose del alambrado.
Pero River sacó la chapa de campeón a la escena y a través del fino Palavecino se metió en partido. Un remate seco con el empeine entró esquinado sobre el palo derecho del arquero Juan Pablo Romero y, en un giro casi mágico, sacudió al ángulo opuesto para marcar el empate.
La tensión comenzó a volver sobre el Gigante con un equipo que ya había desplegado todo su potencial físico y se fue quedando. Emmanuel Ojeda vio la roja por llegar tarde a un cruce y, con diez jugadores, el Canalla resistió sobre el final casi sin volver a generar peligro.
La visita impuso las condiciones y bordeó el área en busca del gol del triunfo, pero le quedó lejos y ya no pudo aprovechar la media distancia de Palavecino, que ya había sacudido dos veces el arco local.
“Acabo de conseguir lo más grande que me pudo pasar en mi vida futbolística. Estoy muy contento de quedar en la historia de mi club. La gente siempre me banca y me da cariño”, expresó emocionado el goleador Marco Ruben, que lamentó que se les haya escapado la victoria “por los dos golazos de River”.
