A dos meses de la última suba, la Municipalidad ya piensa en aumentar nuevamente el precio del boleto del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) cuyo valor vigente es de 3,60 pesos. La secretaria de Servicios Públicos, Clara García, confirmó que el Ejecutivo enviará el pedido formal a los ediles en dos semanas. No habló de porcentajes, pero avisó que el estudio de costos da alrededor de 5 pesos, valor que ya se cobra en otras ciudades como Córdoba y Buenos Aires. Para evitarlo, el concejal Jorge Boasso, pidió avanzar con el Fondo Fiduciario Municipal que distribuya a las empresas recursos en función de la cantidad de kilómetros recorridos.
Precisó que el 6 de marzo pedirán a los ediles evaluar un aumento. A su entender –y a la luz del último estudio de costos del Ente de Movilidad que habría arrojado, según trascendió, una brecha del 40 por ciento entre el costo del TUP y el boleto–, dos razones justifican el incremento de la tarifa.
La devaluación del dólar que elevó el precio de los combustibles y el de las carrocerías importadas; y las paritarias –aún abiertas– de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), cuyo chóferes exigen una actualización salarial de no menos del 25 por ciento.
Así las cosas y con una inflación que ya dejó atrás el último aumento del boleto del 12,5 por ciento, para García es necesario rediscutir la tarifa.
“En Buenos Aires, el colectivo aumentó un 66 por ciento. El que no tiene la tarjeta SUBE paga alrededor de 5 pesos según el trayecto”, apuntó la funcionaria.
En tanto para Boasso, “es momento de introducir cambios de fondo” en el sistema. Como alternativa para no aumentar el boleto, el edil radical insistió en su proyecto que propone subsidiar a las empresas a través del Fondo Fiduciario Municipal según cantidad de kilómetros recorridos.
“Seguramente habrá entre las distintas empresas distintos costos propios de operación –aclaró–, pero se pagará al costo que determine el estudio del Ente de Movilidad como válido. De esta manera, las empresas que operen con ineficiencias operativas, y no porque transporten menos pasajeros, recibirán un pago menor, y tendrán que mejorar su eficiencia para ser viables, independientemente de los pasajeros que lleven».
Fuente: Rosario3