En la madrugada del sábado y en la del domingo, dos episodios se repitieron con actores similares. Dos taxistas dieron positivo a los controles de alcoholemia realizados por la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana, y de esa manera se les remitió el vehículo al corralón.
El primer caso se dio en la madrugada del sábado, cuando la Policía de Seguridad Vial detuvo a un taxi de la localidad de Rosario en Pérez. El Chevrolet Classic, patente MCI 705 y RA 3588, se vio obligado a detenerse y al soplar el alcoholímetro marcó 0.82 g/l. Pero además, el conductor tampoco contaba con licencia de conducir, por lo que se produjo la remisión.
El domingo a la madrugada, se recibió una denuncia de un taxista alcoholizado al 147, luego de realizarse el seguimiento por GPS, se identificó el Renault Logan patente MZE 589 y RA 3890 detenido en la estación de servicio de España y Pellegrini. Al realizarse el test de alcohol, el resultado le dio 1,94 g/l, siendo este el resultado más alto de todo el fin de semana, contabilizando todos los controles que se dieron en la ciudad. El taxi fue remitido al corralón y al titular del taxi, quien era el que conducía, se le retuvo la licencia.
Vale aclarar que si bien el límite de alcohol en sangre para los conductores de autos es 0.5 g/l, para los servicios públicos es directamente 0. En todo 2014 se detectaron 7 casos de alcoholemia positiva en taxistas, mientras que estos fueron los dos primeros de este 2015.