Con el respaldo de la mayoría de los bloques, el proyecto del descanso dominical para el comercio santafesino obtuvo media sanción en la Cámara baja. De ese modo, la iniciativa que obliga a determinados comercios a cerrar los domingos y feriados en todo el territorio santafesino tendrá curso hacia el Senado.
Mientras los trabajadores nucleados en el gremio de empleados de comercio se concentraron en la Legislatura para acompañar el debate legislativo y expresar de esa forma su apoyo, algunas otras voces sugirieron la necesidad de una mayor discusión o manifestaron directamente su oposición. Tal es el caso del gobernador Antonio Bonfatti y del intendente santafesino José Corral.
La normativa, que obtuvo 38 votos a favor y 7 en contra (del bloque de la UCR), fue cuestionada por Darío Boscarol. En el recinto, el legislador reconoció que hay “un problema real, vinculado a la vulneración de los derechos de los trabajadores, de las distintas áreas comerciales”, por el que “se termina obligando a los empleados a trabajar los domingos y no se los remunera acorde a las leyes nacionales”.
“Estamos convencidos de que esta ley va a traer efectos negativos, consecuencias no deseadas, habrá alrededor de un 30 por ciento de comercios en los shoppings que deberán cerrar, va a haber empleados que van a perder su trabajo”, fundamentó Boscarol.
En cambio, el presidente de la Cámara de Diputados, Luis Daniel Rubeo, celebró que se haya dado media sanción al proyecto y sostuvo: “Es la recuperación de un derecho que les había sido arrebatado a los trabajadores durante la última dictadura militar”.
“Esta iniciativa ha acumulado un amplísimo consenso desde el sector gremial, empresarial y político”, destacó el legislador y agregó: “Lo que busca es igualar derechos para que los trabajadores mercantiles tengan la misma posibilidad, que el resto de los trabajadores, de disfrutar del domingo como día de descanso y de encuentro con la familia”. Aclaró, que “se trata de cambiar un poco el hábito de consumo, ya que las compras se podrán hacer hasta el sábado a las 10 de la noche”.
El proyecto indica que quedan excluidos de la legislación bares, restaurantes, teatros, cines, juegos infantiles y todo tipo de comercio vinculado al esparcimiento. También los pequeños locales atendidos por sus dueños, servicios de sepelio, puestos de diarios y revistas y estaciones de servicio.
El artículo primero de la norma señala que los establecimientos comerciales deben cerrar los domingos y feriados, y en el caso del 24 y el 31 de diciembre, el cese debe iniciarse desde las 16.
Cuando se presentó el anteproyecto en Rosario, el secretario general del gremio de los mercantiles, Luis Batistelli, defendió las razones “económicas, políticas, sociales y culturales” para recuperar el descanso en domingos y feriados. Negó que se corte a los trabajadores la posibilidad de cobrar adicionales. “La gran mayoría de los trabajadores denuncian que cuando trabajan esas jornadas lo hacen porque los amenazan con despidos”, enfatizó.
Fuente: Diario La Capital.