Este jueves, de 10 a 12, se realizará la instalación pública Mil Grullas por la Paz, organizada por los proyectos La Ciudad de los Niños y Mil Grullas por la Paz y por la Asociación C.H.I.C.O.S., en el Monumento Nacional a la Bandera.
En la oportunidad, alrededor de 70 niños, adolescentes, jóvenes y adultos que asisten a los Centros de Convivencia Barrial (CBB) Emaús y Ayacucho y al Centro de Día La Casa se sumarán a la tradicional propuesta que, desde hace 17 años, se lleva adelante en la ciudad como expresión de un deseo colectivo: vivir en paz.
En esta nueva edición, que se enmarca en el 70º aniversario del bombardeo nuclear a la ciudad japonesa de Hiroshima, ocurrido el 6 de agosto de 1945, jóvenes y adultos del taller Festejando y niños de los talleres de Plástica y Cuentos del CCB Ayacucho (Ayacuho 6317, distrito Sur) colgarán sus grullas, realizadas desde hace unos meses, en los espacios artísticos del centro barrial, al igual que las confeccionadas por un grupo compuesto por niños, padres y docentes del CCB Emaús (Génova 7958, distrito Noroeste).
En tanto, el Centro de Día La Casa (Mendoza 1247, distrito Centro), participará de la iniciativa de la mano de chicos, adolescentes y coordinadores de los espacios artísticos y recreativos que se dictan en la institución, quienes, a su vez, tendrán a cargo el cierre de la actividad con un espectáculo musical ofrecido por el grupo de percusión Tocando Madera.
Declarada de interés municipal, Mil Grullas por la Paz es una propuesta que consiste en plegar, cada año, al menos mil grullas y colgarlas en un espacio público. Se trata de una acción simbólica que busca sensibilizar sobre el concepto de la paz y su vinculación con la construcción de una sociedad más justa y solidaria, y de un mundo con más oportunidades para todos los seres humanos.
En base a la leyenda japonesa que cuenta que quien logre hacer mil grullas conseguirá ver cumplido su más grande deseo, que en este caso es el de vivir en paz, instituciones y ciudadanos se suman, una vez más, a la tradicional convocatoria con grullas multicolores y de tamaños diversos realizadas a través de la técnica del origami (arte consistente en el plegado de papel sin usar tijeras ni pegamento para obtener figuras de formas variadas).
Una apuesta por la paz
El proyecto Mil Grullas por la Paz surgió en 1999 de un grupo de personas que comparten talleres de origami dictados por la profesora Meri Affranchino. En la actualidad, estos talleres están nucleados en la Asociación C.H.I.C.O.S., organización inserta en la comunidad a partir de su trabajo con niñas, niños, adolescentes y jóvenes en situación de calle o en condición de vulnerabilidad.
La propuesta de plegar cada año al menos mil grullas ha ido sumando voluntades individuales y grupales. Han transcurridos varios años desde sus inicios y también recorrido diferentes escenarios (Casa de la Poesía, Centro de Expresiones Contemporáneas, Ciudad de los Niños en la Estación Embarcaderos, la propia casa de C.H.I.C.O.S., La Isla de los Inventos), pero desde 2006 el espacio elegido es el Monumento Nacional a la Bandera, centro cívico por excelencia de la ciudad.
¿Por qué el 6 de agosto?
El 6 de agosto de 1945, durante la II Guerra Mundial, los aliados arrojaron sobre la ciudad de Hiroshima la primera bomba atómica. El mando supremo aliado informó que 129.558 personas murieron, fueron heridas o desaparecieron a causa del lanzamiento, y más de 176.987 perdieron sus hogares.
La población de Hiroshima en 1940 era de 343.698 habitantes, y la explosión arrasó más de 10 km2 de terreno, cerca del 60% de la superficie de la ciudad.
Cada año, el 6 de agosto (desde 1947), miles de personas participan en una ceremonia multiconfesional en el Parque de la Paz, construido en el lugar en donde explotó la bomba, donde se honra a los fallecidos con grullas que llevan sus deseos de paz.
En 1949, el gobierno japonés nombró a Hiroshima santuario internacional de la paz.
Hace algunos años, algunos artistas de todo el mundo se unieron simbólicamente plegando mil papeles en forma de grullas y aportando su esfuerzo por la paz.
Cada uno ha ido eligiendo la fecha en la que armar su Árbol de la Paz. Rosario ha preferido hacerlo el 6 de agosto para que cada año se vuelva a pensar en ese inicio fatídico de la cadena de violencia sobre la población civil y en cuánto se reproduce en el quehacer cotidiano.
Presentan nueva edición de Mil Grullas por la Paz en el Monumento
