Central lo hizo otra vez. El clásico rosarino volvió a quedar en manos del equipo de Miguel Ángel Russo, que se impuso claramente por 2-0 sobre Newell’s y volvió a desatar un delirio en el Gigante de Arroyito de la mano de los goles de Franco Niell y Nery Domínguez. La Lepra, en tanto, no mostró reacción ni un conductor del juego.
Luego de un arranque de ida y vuelta, el Canalla supo neutralizar al ataque rojinegro y en un centro aislado de Hernán Encina conectó Niell para volver a marcarle a Newell’s: lanzó un cabezazo que dio en el palo e ingresó.
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Luego, el ex delantero de Gimnasia salió lesionado por una molestia y en su lugar ingresó José Valencia, quien no supo conectarse para molestar al arco rival.
Una extraordinaria acción personal de Ignacio Scocco amenazó con igualar el juego en Arroyito: se escapó de entre varios marcadores, definió cruzado y el palo le dijo no. En el rebote, Maxi Rodríguez también falló.
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Sin embargo, cuando la visita parecía mostrar los primeros indicios de reacción, llegó un nuevo centro proveniente de un lateral en el que Sebastián Abreu molestó a Oscar Ustari y, de rebote, Nery Domínguez le rompió el arco al arquero, que estaba dolorido.
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En la segunda mitad se repitió la tendencia, aunque con un Central más retrasado y aguardando por lo que pudiera exhibir el conjunto de Gustavo Raggio, que lució inconexo y con chispazos de Scocco. Fue el artillero de Hughes el único que sembró dudas en el resultado final del clásico.
Con el ingreso de Fernando Barrientos, los de Russo atraparon la pelota y a través de la posesión cerraron los caminos para Newell’s, que no tuvo un conductor de juego ni mostró reacción para responder a la adversidad que se le presentó en el Gigante.
La presión del colombiano Valencia casi transforma en tres la diferencia pero un rechazo de Ustari que rebotó en el ex Olimpo se fue apenas afuera.
Para colmo, cuando corrían 30 del segundo tiempo, Scocco se filtró en el área simuló un penal que Caranta no le cometió y le hizo un polémico gesto al árbitro Patricio Loustau, quien a instancias del línea de ese sector le mostró la roja y terminó por condenar a la derrota a la Lepra. En el final, cuando restaban segundos, vio la expulsión el juvenil Leandro Figueroa por bajar de atrás a Barrientos.
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De contraataque pudo golear el elenco de Russo, pero quedó en offside la mayoría de las ocasiones y cuando no lo hizo, por ejemplo, falló Encina de cara al arco visitante. O Valencia, que casi aprovecha un error de Víctor López, que dejaba una bola corta para Ustari. Fue final del partido, fiesta en el Gigante de Arroyito y un nuevo triunfo del equipo de Russo, que sigue de racha en el derby rosarino.
Central volvió a ganarle a Newell’s y se quedó con otro clásico rosarino
