En Rosario, los hostels están en alerta. De ser una ciudad pionera en este tipo de hospedaje, con más de 2.000 camas disponibles, hoy quedan apenas 13 establecimientos en funcionamiento. ¿El motivo? La competencia desigual frente a plataformas como Airbnb y Booking, donde muchos alojamientos operan sin habilitación ni controles.
Omar Ortiguela, presidente de la Cámara de Hostels de Argentina, expuso la problemática ante la comisión de Producción y Promoción del Empleo del Concejo Municipal. “Nos exigen habilitaciones, controles y tributos, mientras que en estas plataformas cualquiera puede ofrecer alojamiento sin cumplir requisitos”, advirtió.
El sector hostelero reclama no solo mayor regulación, sino también un Fondo de Inversión Turística que ayude a sostener los establecimientos locales. Además, proponen evaluar la implementación de una tasa municipal para Airbnb y Booking, tal como sucede en ciudades como Bariloche.
En este marco, Ortiguela pidió reactivar lo solicitado oportunamente en un expediente del 2019, donde se da cuenta que no se le solicita habilitación municipal a proveedores de alojamiento en la plataforma Booking.com, y en el caso de Airbnb advierte por “inseguridad del turista”, potenciales estafas, tarifas no reguladas, entre otras cuestiones.
Los concejales reconocieron la complejidad del tema. Norma López (Justicia Social) señaló que la discusión atraviesa cuestiones impositivas y regulatorias. Mariano Roca (Arriba Rosario) pidió un estudio detallado del tema, mientras que Julián Ferrero (Ciudad Futura) remarcó que las economías de plataforma generan un “vacío de control” que perjudica a los alojamientos tradicionales.
El debate quedó abierto, pero los hostels ya marcaron su posición: si no hay reglas claras para todos, el sector seguirá perdiendo terreno.
