En un operativo realizado en forma conjunta por la Secretaría de Control y Convivencia de la Municipalidad y la policía de Santa Fe, un grupo de cuidacoches que tenía su base frente al hospital Centenario, en Urquiza y avenida Francia, fue desplazado del lugar debido a las denuncias que realizaron los vecinos. En el procedimiento hubo un momento de tensión porque uno de los hombres increpó al personal municipal y a los efectivos policiales. Después se comprobó que no tenía documentos y, por resistencia a la autoridad, fue conducido a la seccional 7ª demorado.
Además, en el lugar se realizó un reordenamiento del espacio público que implicó la remisión de cuatro vehículos al corralón y se labraron 20 actas de infracción por estacionamiento indebido.
La titular de Control y Convivencia, Carolina Labayru, señaló que “se recibieron denuncias de vecinos sobre un grupo de trapitos que se estaba comportando de manera muy agresiva, extorsiva. Eso no se va a permitir y en la Mesa de Seguridad del Ministerio se acordó venir a este lugar y hacer un operativo de liberación del espacio público para estas personas no vuelvan más”.
La funcionaria agregó que la mayoría de los cuidacoches fueron identificados, pero uno de ellos no tenía DNI y frente a las “actitudes violentas que tuvo frente al personal municipal e incluso ante la policía, fue demorado y conducido a la seccional para búsqueda de antecedentes” o probables pedidos de captura.
“Hubo momentos de un poco de tensión, porque este trabajo tenemos que hacerlo en compañía de la policía. Cuando hay que proceder a la liberación del espacio público y esta gente ya tiene un comportamiento agresivo con la gente del barrio, también lo tiene frente al personal de Control y la policía”, agregó.
Labayru explicó que en el caso de los cuidacoches de Urquiza y Francia se actuó con el apoyo de un grupo táctico anti tumulto “porque eran varios los trapitos. Ya hemos estado en el lugar, los conocemos y sabemos que el procedimiento puede derivar en una situación de conflictividad mayor”.