Dos mujeres y un remisero oriundo de Villa Gobernador Gálvez fueron detenidos bajo la acusación de haber extorsionado al dueño de un corralón de venta de materiales para la construcción ubicado en la zona sur de Rosario. Además, los pesquisas allanaron una celda de la cárcel de Piñero donde al preso allí alojado le incautaron un chip del celular con el cual había realizado el apriete al comerciante.
Los sospechosos cayeron la tarde de este jueves en un operativo de entrega controlada de dinero que hicieron efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) bajo la fiscalización del fiscal de Flagrancia Pablo Lanza.
El procedimiento se realizó tras la denuncia que presentó el dueño de un corralón de bulevar Oroño al 5300 que venía recibiendo mensajes de WhatsApp en el cual le exigían la entrega de 300 mil pesos para poder seguir trabajando sin que le balearan el comercio. Después de una serie de tareas investigativas y bajo la supervisión del fiscal Lanza, la víctima acordó pagarle al extorsionador y los policías de la AIC armaron el operativo de entrega controlada.
Minutos antes de las 15 de este jueves el dueño del comercio recibió un nuevo mensaje en su celular en el que donde le avisaron que una mujer estaba en la puerta del corralón a la espera del efectivo. Entonces el comerciante salió y le entregó una bolsa de nailon negra donde había un fajo de billetes marcados previamente con los sellos de AIC.
Después de recibir el dinero la mujer caminó por bulevar Oroño hacia el sur hasta llegar al cruce con avenida del Rosario. Allí se subió a un auto donde la esperaban un hombre al volante y otra mujer. El vehículo fue identificado por los investigadores como un “Chevrolet Corsa gris con dominio de remis de la ciudad de Villa Gobernador Gálvez”, detallaron las fuentes de la AIC, quienes interceptaron el paso del auto y detuvieron a sus tres ocupantes.
Las mujeres apresadas fueron identificadas como Natalia O., de 42 años, y Marcia O., de 31, mientras que el conductor fue sindicado como Raúl D., de 63 años. A los detenidos les incautaron tres celulares, los 10 mil pesos entregados por el comerciante y el auto.
Los investigadores señalaron que en medio del operativo una de las mujeres recibió una llamada que “provenía del mismo número de teléfono desde el cual había recibido amenazas el comerciante”. Y cuando fue indagada por los pesquisas se largó a llorar y contó que había sido su hermano David O., preso en Piñero desde el 15 de octubre a disposición del Juzgado Federal 3 por infracción a la ley de drogas quien la había mandado a buscar el dinero.
Entonces, el fiscal Lanza ordenó allanar la celda de David O. de donde se incautó un chip telefónico oculto en un colchón. Además, determinaron que las dos mujeres figuraban en el registro de visitas de este interno.