El dengue se sostiene en la agenda epidemiológica de la provincia de Santa Fe. En la última semana se confirmaron 936 nuevos casos y el número total de contagios en todo el territorio santafesino llegó a 2.312. Esta cifra preocupa y ocupa a las autoridades que reforzaron sus esfuerzos principalmente en el noroeste de Santa Fe donde se concentran la mayoría de los pacientes.
“Del total de contagios, el 85% corresponden al departamento General Obligado. Por eso han acudido muchos grupos territoriales, de Rosario y Santa Fe. a trabajar con descacharrado, fumigación y bloqueos”, explicó la ministra de Salud provincial, Sonia Martorano.
Con respecto a la situación epidemiológica en el resto de la provincia, la funcionaria destacó que Rosario y Santa Fe también presentaron un leve aumento. En lo que respecta a nuestra ciudad, el secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, habló de “un aumento importante dentro de un número bajo de casos”.
“Ya hay 39 casos autóctonos donde no se puede explicar el antecedente de viaje. Son pacientes distribuidos en todos los distritos de la ciudad. Por eso es muy importante seguir reforzando el bloqueo epidemiológico, trabajando alrededor de las 9 manzanas del caso confirmado”, remarcó el secretario municipal.
Además, ambos referentes sanitarios insistieron en la importancia de avanzar en la prevención. Para esto instaron a la sociedad a que profundice las tareas de descacharrado en ambientes al aire libre. “E fundamental quitar todo reservorio de agua donde el mosquito se reproduce”, aseveraron.
A eso, Caruana le sumó también la necesidad de que las personas que tengan antecedente de viaje de zonas donde hay circulación de dengue, incrementen los recaudos. “Si hay síntomas febriles, hay que empezar a pensar en este problema de salud. Generalmente el dengue no es de gran jerarquía en la primera infección, pero si hay una reinfección pasa a ser más complejo”, concluyó.
¿Cómo prevenir la aparición del mosquito?
En el interior de la casa:
- Mantener limpios y ordenados los espacios.
- Mantener los ambientes libres de mosquitos utilizando espirales, pastillas o insecticidas o sahumar con plantas secas encendidas (como romero, eucalipto, alcanfor o menta).
- Colocar telas metálicas o tejidos mosquiteros en puertas y ventanas.
- Utilizar repelentes comerciales (de extra duración dado la menor frecuencia en que debe aplicarse), biorepelentes o repelentes caseros (se pueden utilizar siempre y cuando no haya un brote epidémico).
- Revisar elementos que acumulen agua como por ejemplos floreros. En este caso, se puede cambiar el agua por arena húmeda.
- Reutilizar, reciclar o reducir residuos sólidos que puedan convertirse en criaderos de mosquitos (por ejemplo: envases de alimentos y bebidas no retornables, etc.)
En el patio o jardín:
- Vaciar baldes y latas para que no se acumule agua.
- Tapar las botellas con o sin agua.
- Poner bajo techo las cubiertas de neumáticos.
- Mantener tapados los tanques de agua.
- Limpiar diariamente los bebederos de animales (vaciarlos, cepillarlos y volverlos a llenar).
- También se recomienda mantener el césped cortado y las plantas podadas, usar de repelente corporal y espirales, así como también el uso de vestimenta clara al momento de realizar actividades recreativas o deportivas en espacios verdes.
Síntomas
- Fiebre acompañada de dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones.
- Náuseas y vómitos.
- Cansancio intenso.
- Aparición de manchas en la piel.
- Picazón y sangrado de nariz y encías.