“Ya no hay más ofertas por hoy, se fue todo al carajo”. Así de clara y contundente es la forma que un comerciante del centro rosarino encontró para expresar su hartazgo con la inflación, a través de un pizarrón en la vereda con esa frase. La fotografía circuló por Twitter, Facebook y WhatsApp.
Juan, conocido como El Pelado (así firmó el cartel que se viralizó en redes), tiene un mercadito en Santa Fe al 1400. Es una zona de permanente circulación, pero, asegura, cada vez vende menos porque los productos no paran de aumentar. “Es alevoso lo que está pasando, los aumentos no paran y no podés trasladar todo a los precios porque no vendés. Un sachet de yogurt no puede estar a 400 pesos”, se quejó el comerciante.
Sobre el cartel en el exterior de su negocio explicó: “Me agarró un día de furia. Si trabajando te estás fundiendo, imaginate si no trabajás”, reflexionó. “Los formadores de precios de las grandes cadenas van a hacer que el sistema en algún momento se caiga porque la gente no puede seguir pagando estos precios. Entonces, no esperemos que ellos o los gobernantes hagan algo, lo tenemos que hacer nosotros”, señaló.
En ese sentido, sugirió que “si un fideo aumentó 50 y el otro 100, no compremos el que aumentó 100. Nadie se va a morir por consumir otra marca, están todos homologados para poder venderse”. Considera que con ese castigo, las primeras marcas se verían obligadas a bajar sus montos.
“Este martes aumentó una famosa gaseosa que ya había remarcado los precios hace 15 días. Hoy, la versión más chica de ese producto en un supermercado cuesta 120 pesos, que para mí es una locura”, describió Juan, quien ante esa realidad se muestra desesperanzado: “Es lo que nos toca vivir. En mis 60 años, veo que las cosas están mal llevadas, no lo digo por el gobierno, sino en general. Y nosotros no hacemos nada” ante los abusos de precios.
Además, contó un caso reciente en su comercio, como una foto del momento que vive el país: “El otro día un chico me compró una merienda de 300 pesos con tres medios de pago. Una parte con Billetera Santa Fe, otra con débito y le sobraban 30 pesos en el bolsillo para completar los 300 pesos. Con eso ya te digo todo”.
En ese sentido, se preguntó: “¿Qué oferta puedo hacer si todo se fue al carajo? Intento hacerlo, pero esa promoción a los diez días caduca porque el producto viene con aumento. La harina aumentó el doble; gaseosas, 30 por ciento; no vendo carne, pero subió un 50 por ciento. Hoy escuché que los huevos de Pascua aumentaron un 150 por ciento con relación al año pasado”.